Citas.

"La vocacion del politico de carrera es hacer de cada solucion un problema. "
Woody Allen

"La política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnostico falso y aplicar después los remedios equivocados."
Groucho Marx

"la política es demasiado importante como para dejarla en manos de los políticos profesionales"
Varios autores

lunes, marzo 30, 2009

Partidos (por la mitad)

En nuestro sistema partitocrático, causaría asombro a un observador imparcial (caso de existir) que los principales actores del mismo no tengan reglas claras y blanco sobre negro sobre su financiación. O mejor dicho, las tienen, pero estas leyes no garantizan el nivel de ingresos que necesitan para funcionar al nivel que lo hacen actualmente. Esto obliga a ciertos trapicheos para mantener la empresa (el partido) en funcionamiento. No hace falta que recuerde casos pasados de escándalos.

Para mantener estas empresas en marcha es fundamental la permanencia en el poder, para lo cual se utilizarán todos los medios al alcance de la empresa. Parece esa, y no otra, la principal prioridad de los partidos mayoritarios. Cuando existen dos partidos con opciones reales de gobernar, se puede acceder a la victoria de dos formas: por méritos propios y por deméritos ajenos.

Y que tenemos en medio, unas entidades financieras con participación en sus órganos de gobierno de ayuntamientos y CCAA, es decir políticos. En momentos malos, la politización de los consejos, y su utilización por los políticos de uno y otro signo como arma electoralista supone un lastre muy grande para su gestión. Y así pasa lo que pasa.

La entrada podría acabar aquí, pero quiero dar unas vueltas más al argumento, unas vueltas que, en realidad, eran la entrada original. Después de conocer que en una situación como la actual de 350 diputados sólo 34 tienen dedicación exclusiva, (muy bueno el artículo de JJ Millas, a pesar de sus innegables pinceladas partidistas); se puede pensar que los políticos viven en otra realidad diferente a la de sus teóricos representados. Constituyendo una clase cerrada, gracias, entre otras cosas, al desprestigio que tienen; llego a la conclusión de que el poder político en España ( y en buena parte de los países democráticos) está en manos de una casta endogámica dedicada a sus propios asuntos (básicamente mantener el poder). Cada x tiempo se pide a sus súbditos que elijan entre dos señores. Gran capacidad de elección y decisión, si señor. Estamos como en tiempos de la monarquía electiva de los visigodos: en una oligarquía. Incluso entonces había más rotación en el trono debido a que los métodos de destitución de los gobernantes solían ser menos sutiles que en la actualidad (algún avance hay que reconocer).


Corrección: según este artículo, son algo menos de unos 100 los que tienen dedicación exclusiva.

1 comentario:

Pablo dijo...

Lo malo de compaginar la actividad política remunerada con la otra (la privada) es que luego se pierde la noción de la prioridad. Por ejemplo, Esperanza Aguirre no presidió en su día el Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid porque tenía "un acto privado comprometido hace mucho tiempo".

A mí me parece que debería figurar esa cláusula en todos los convenios colectivos.

/* esto es lo de Google Analitycs */