Interrail (23) Copenhague

Tras el incidentado viaje llegamos a Hamburgo, donde nos esperaba un transbordo de apenas 10 minutos antes de proseguir hacia Copenhague. Ahora mismo la duración de un viaje de estas características oscila entre 5 y 8 horas. Me inclino a pensar que la duración de nuestro trayecto estaría más cerca de lo último que de lo primero. Todavía nos quedaban otras 6 horas que incluian el ingreso en nuestro primer país escandinavo.

El tren que tomamos en Hamburgo hasta CPH iba casi vacío, de hecho don't y yo teníamos un compartimento para nosotros solos mientras que el resto iba en otro. Cuando llegamos a la frontera danesa un aduanero nos selló el pasaporte a don't y a mi, a los demás no, imagino que le debió parecer excesivo trabajo... De todas formas, el viaje era relativamente entretenido, con un montón de puentes para pasar a la isla donde esta situada la capital. El paisaje parecía un poco el fin del mundo: llano, verde y el mar al fondo.

Cuando llegamos a Copenhague nos encontramos con un día soleado, de hecho, el más veraniego desde que salimos de Italia. Este era el primer país del que no habíamos preparaado nada, y del que no teníamos ningún tipo de referencias. No se porqué, pero esperaba un país de edificios de hormigón pseudo soviéticos, o , como mucho en la onda de Alvar Aalto. Por tanto, la primera sorpresa fue encontrarnos una estación bonita (en la foto) y, al lado, una preciosa plaza del ayuntamiento.

Y otra agradable aunque relativa sorpresa, aunque la fama popular se la llevan las suecas, comprobamos que las danesas eran muy guapas. Digo relativa, porque ya habíamos visto a muchas mochileras danesas, al menos pensamos que esa era su nacionalidad porque eran chicas rubias que llevaban la bandera de Dinamarca en algún lugar del equipaje.

Lo primero es lo primero y fue buscar el albergue donde pasaríamos una noche. Estaba situado en las afueras. He intentado buscar por internet albergues para intentar localizar donde estaba y no he sido capaz de decidirme por ninguno de los que aparecen, pudiera ser este... Como sucedía en algunos de ellos era obligatorio llevar sábanas. Y, en este lugar, por primera vez en el viaje,al rellenar la ficha de entrada nos exigieron enseñar las sábanas. Desconfiados...

Dejo el resto de CPH para otra(s) entrada(s). Con el vertiginoso ritmo de escritura que llevo no me planteo fechas para terminar este relato, pero intentaré llegar a Stockholm antes de agosto, creo que puedo lograrlo.