Londres

Londres es una de las capitales del mundo: una de esas ciudades donde siempre parece que ocurren cosas que trascienden sus límites.

en esta ocasión vimos Brick lane, un mercadillo camino del east end, cerca de donde Jack el destripador ejercía su cirugía callejera. Al lado de un barrio con gran cantidad de bangladesíes, hay una concentración de puestos con todo tipo de artesanías y tenderetes de street food, algunos situados en la calle y otros en el interior de antiguos almacenes. Londres siempre tiene alguna novedad para el viajero habitual..

Otro lugar que descubrimos son los cuarteles subterráneos, bajo Whitehall donde Churchill tenía su cuartel bajo tierra en la segunda guerra mundial. Aquí tomaba Churchill sus decisiones en este escondrijo realmente poco espacioso, donde mucha gente trabajaba a turnos, en ocasiones sin poder salir por las bombas. Se incluye una exposición bastante completa sobre la vida de sir Winston. Muy recomendable para quien tenga un mínimo interés en la Historia..

 aquí dormían los oficiales destinados en los cuarteles...

La sala de control.

Cerca de Picadilly está St James street, donde perduran algunos de los clubs más antiguos de Londres junto con las oficinas originales de Justerini & Brooks. Igual por ese nombre no os dice nada, pero sí por sus siglas: JB. Como cápsulas del tiempo, esos clubes permanecen más o menos intactos desde 150 o 200 años.

En realidad este viaje sirvió para el reencuentro con viejas amistades y los brujuleos turísticos quedaron en segundo plano.Es igual, Londres sigue ahí y siempre es recomendable una visita.